Dimensiones de la innovación pública en el Perú

Las dimensiones para la innovación pública son orientaciones que propone la Secretaría de Gestión Pública (2021) con miras a facilitar su implementación. Estas incluyen activar un cambio de la cultura organizacional, implementar los incentivos más factibles y con mayor impacto, así como generar un ecosistema que fomente la innovación.

No son tareas fáciles, dado el ambicioso concepto que también proponen: “proceso inclusivo e iterativo para definir problemas públicos, co-crear, prototipar e implementar soluciones viables, que modernicen al Estado y agreguen valor a las personas” (Secretaría de Gestión Pública, 2021).

Es decir, además de diagnosticar y solucionar problemas, tendrás que generar valor público y, de paso, modernizar al Estado. En ese post, ahondamos en estas tres orientaciones para una efectiva gestión de la innovación pública en el Perú.

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Cultura orientada a la innovación

Lograrás implementar una cultura innovadora cuando tu equipo de trabajo muestre apertura a las nuevas ideas, asuma la creatividad como un motor y al emprendimiento como una actitud constante. Arribar a esa costa implicará, en muchos casos, un largo viaje.

Verás tierra a la vista cuando percibas que tu equipo de trabajo asume responsabilidades de manera conjunta; logra que las normas estén al servicio del ciudadano y no al revés; prefiera construir políticas de Estado por sobre acciones políticas efímeras, y establezcan un trabajo colaborativo con flexibilidad para adaptarse a los cursos de acción más efectivos.

Para no desviarte en este complejo camino, debes promover un pensamiento crítico que erradique el cómodo status quo que suele habitar en el estado; adecua el espacio e instala los recursos necesarios, siempre será una buena inversión; usa tecnologías para todo lo que puedas; genera evidencia para sustentar todas las propuestas, si no lo mido, no existe; y mejora tu capacidad de comunicar de manera sucinta e inspiradora.

No olvides que el apoyo del más alto nivel en tu organización es absolutamente necesario. Si no tienen una convicción genuina por acelerar los motores y superar las barreras para innovar en la función pública, es probable que los cambios que generes en tu cultura organizacional retrocedan tan pronto te ausentes. La innovación pública será siempre un acto de valentía.

Incentivos a la innovación pública

Fijar los incentivos más efectivos para fomentar la innovación pública implica recompensar el comportamiento a través de reconocimientos, compensaciones monetarias y no monetarias, capacitaciones o actividades de ocio.

También puedes proponer sanciones, aunque siempre tendrá un impacto menor. Castigar el error en exceso, por ejemplo, mata la posibilidad de aprender rápido para seguir con la búsqueda de la innovación. Y si la palabra “Contraloría” acaba de aparecer en tu cabeza, sabes a lo que nos referimos.  

Por otro lado, es poco común que los reglamentos o manuales incluyan la función de innovar. Dado que no está en las responsabilidades, no se hace. También se suele otorgar poco o nulo tiempo para las actividades necesarias para innovar, no es una prioridad. Y lo más duro es cuando solo se mide el éxito de la innovación desde lo funcional, dejando de lado otros beneficios potentes como son el aprendizaje y el sentido de pertenencia.

Ecosistemas de innovación

Fomentar un ecosistema de innovación implica contar con una comunidad dinámica basada en la colaboración, la confianza y la creación conjunta de valor. Conseguirlo demanda un alto esfuerzo por articular con diversos actores cuyas redes de interacción suelen ser muy ágiles y cambiantes.

En este caso, deberás invertir recursos y tiempo para conectar con estas redes y fomentar su desarrollo. Y es que, ante la escasez de recursos en el Estado, los ecosistemas son clave para fomentar la creación de soluciones innovadoras.

Según Nesta (2019), los ecosistemas están conformados por empresas, entidades públicas, organizaciones de soporte, universidades, emprendimiento, laboratorios y centros de investigación. Para interconectarlos, es recomendable que generes espacios donde compartan sus experiencias y aprendan; propón visiones inspiradoras y objetivos misionales que los convoque; se prospectivo, no reactivo, para identificar soluciones trascendentes, y asegúrate de que la y el ciudadano estén siempre al centro.

Finalmente, te recomendamos seguir los métodos para innovar en la gestión pública que faciliten identificar soluciones viables que aporten valor a las personas. Para implementarlas, se debe transitar por caminos con muchos obstáculos, propios del devenir de la administración pública. De ahí la importancia de abrir la mente a nuevas ideas y tomar riesgos (dimensión cultural), fomentar un trabajo colaborativo y abierto (dimensión del ecosistema) y generar las condiciones para motivar cambios hacia una visión innovadora (dimensión de los incentivos).

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