La diversidad cultural en el Perú

El Perú es uno de los países con mayor diversidad cultural del mundo, por lo que conforma un valor intrínseco en nuestra sociedad. Para atender a esta diversidad las políticas culturales en el Perú suelen concentrarse en el reconocimiento y valoración de los pueblos indígenas u originarios y de sus lenguas, así como en la población afroperuana.

Estas políticas también incluyen el patrimonio cultural inmaterial salvaguardado por nuestras culturas a lo largo de la historia, el cual cuenta con reconocimientos oficiales tanto en el ámbito nacional como a nivel mundial.

A continuación, realizamos una breve descripción de cada uno de estos aspectos.  

Pueblos indígenas u originarios

El Perú cuenta con 55 pueblos indígenas u originarios localizados en los Andes y la Amazonía reconocidos oficialmente en la Base de Datos de los Pueblos Indígenas del Ministerio de Cultura (2021a).

Se considera pueblo indígena u originario a la población descendiente de los pueblos prehispánicos originarios que habitaron el actual territorio peruano hasta el arribo de los conquistadores españoles, a inicios del siglo XVI (Ministerio de Cultura, 2015). Asimismo, son aquellos que “conservan todas o parte de sus instituciones distintivas; y que, además, presentan la conciencia colectiva de poseer una identidad indígena u originaria” (Ministerio de Cultura, 2021a).

A lo largo de la historia, estos pueblos han sido explotados y marginados. Según el Ministerio de Cultura (2015), los pueblos indígenas andinos, principalmente quechuas y aimaras, fueron objeto del reordenamiento impuesto por las encomiendas y reducciones coloniales. Asimismo, en varios casos, fueron explotados en las haciendas durante la República. En la Amazonía, los pueblos originarios vivieron la incursión de las misiones, la explotación del caucho y la colonización paulatina (Ministerio de Cultura, 2015).

En la Amazonía, habitan también los Pueblos Indígenas en situación de Aislamiento o Contacto Inicial (PIACI), ubicados en territorios intangibles delimitados por el Estado denominados como “Reserva Territorial” (Congreso de la República, 1978) y «Reserva Indígena» (Congreso de la República, 2006).

A la fecha, el Perú cuenta con siete reservas indígenas y territoriales ubicadas en las regiones de Madre de Dios, Cusco, Huánuco, Loreto y Ucayali (Ministerio de Cultura 2021b). A futuro, las reservas indígenas tienen intención de reemplazar la figura de reservas territoriales, ya que ofrecen mayor protección legal a los derechos individuales y colectivos de los PIACI (Ministerio de Cultura, 2016).

Lenguas indígenas

Según el Ministerio de Cultura (2021a), tradicionalmente se ha llamado dialecto, de manera peyorativa, a la manera en la que una lengua es usada en determinada zona geográfica. Específicamente, las lenguas indígenas y sus variedades geográficas son lenguas en todo el sentido de la palabra, y no dialectos, anteriores a la difusión del idioma castellano o español y que se preservan y se emplean en el ámbito del territorio nacional.

Actualmente, el Perú cuenta con 48 lenguas indígenas, cuatro se hablan en los Andes y 44 en la Amazonía.  Las lenguas quechua y aimara son las más predominantes en la zona andina y el ashaninka en la zona amazónica. Alrededor de cuatro millones de peruanos y peruanas, el 16% de la población, hablan una lengua indígena.

Población afroperuana

El Perú también está conformado por la ciudadanía afroperuana, que representa cerca del 4% de la población nacional.  Más de 828 mil ciudadanos se autoidentifican como parte del pueblo afroperuano, el segundo pueblo más grande en el país, de acuerdo con la información del Censo Nacional de Población y Vivienda 2017 (Instituto Nacional de Estadística e Información, 2017).

Actualmente, esta población está en todo el territorio con mayor concentración en los departamentos de Lima, Piura, La Libertad, Lambayeque y Cajamarca.

Patrimonio cultural

Nuestro país alberga más de 170 expresiones y manifestaciones culturales vigentes de diversos pueblos declaradas como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Nación. Ellas abarcan el ámbito de las prácticas, las representaciones, las expresiones, los conocimientos y los saberes –así como los instrumentos, objetos, artefactos y espacios culturales asociados con ellos– que las comunidades, los grupos y los individuos, reconocen como parte de su patrimonio cultural (Ministerio de Cultura, 2011).

Destacan aquellas reconocidas como Patrimonio Cultural Inmaterial por la UNESCO:

• El arte textil de Taquile en el altiplano andino.
• El patrimonio oral y manifestaciones culturales del pueblo zápara en la Amazonía.
• Patrimonio cultural inmaterial de las comunidades aimaras de Bolivia, Chile y Perú.
• La danza de las tijeras, interpretada tradicionalmente por los habitantes de los pueblos y las comunidades quechuas del sur de cordillera andina central del Perú.
• La huaconada, danza ritual de Mito de la provincia de Concepción en Junín.
• Eshuva, rezos cantados de la etnia Huachipaeri.
• La peregrinación al santuario del Señor de Qoyllurit’i en Cusco.
• Conocimientos, técnicas y rituales vinculados a la renovación anual del puente Q’eswachaka en la provincia de Canas en Cusco.
• La fiesta de la Virgen de la Candelaria en Puno.
• La danza del wititi del valle del Colca en Arequipa.
• Sistema Tradicional de Jueces de Agua de Corongo en Áncash.
• El ‘Hatajo de Negritos’ y ‘Las Pallitas’, danzas del sur de la costa central del Perú.

Debemos considerar que nuestra diversidad cultural está estrechamente relacionada a la biodiversidad del Perú, caracterizada por la variedad geográfica, biológica y de clima existentes en nuestro país, albergando el 70% de la biodiversidad del planeta (GIZ, 2021). En este contexto, el Perú posee un enorme potencial de desarrollo de bienestar para todas y todos.  

El reconocimiento y valoración de la diversidad cultural en el Perú serán importantes para la construcción de políticas públicas y la formación de competencias para mejorar su gestión de cara al bienestar y cohesión nacional.

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Si bien hemos mostrado una parte importante de la diversidad cultural en nuestro país, es necesario continuar los esfuerzos por incluir todas las expresiones culturales que fortalecen nuestra identidad nacional.

(Con la colaboración de Andrea Alva)